jueves, 26 de enero de 2017

Wolfgirl llega a nuestras aulas

¿Qué mejor forma que proponer a los alumnos que diseñen su propio mutante. Ese ser que les identifica como seres de una sociedad cambiante y a la que ofrecen todos sus poderes
Sin duda nos ayudará mucho a dirigir nuestro trabajo y explotar su potencial
1.- Nombre y descripción física del mutante: Wolfgirl es un mutante de estatura media, rostro infantil y gesto agradable.
2.- Lugar de origen: Su origen está en nuestra misma ciudad, compartimos muchas cosas, lugares, cultura. Resultaría muy fácil, realizar actividades en común, desde la misma realidad.
3.- Personalidad: Creatividad, amabilidad y facilidad para el canto. Es por tanto un ser inquieto, que necesita tocar, manipular, vivenciar. Aprender desde la experiencia y la emoción.
4.- Aliados: Como buen e inquieto mutante, busca la relación con sus compañeros, el encuentro, el aprendizaje mutuo a través del juego como principal medio adquisición de conocimiento
5.- Enemigos: Lucha fervientemente contra la monotonía, las metodologías trasnochadas. Tiene miedo a no poder desarrollar sus inquietudes, a que el ambiente sea hostil y vaya en contra de sus intereses.
6.- Poderes, destrezas y habilidades: Wolfgirl es un mutante con unas características muy especiales: creatividad, amabilidad y facilidad para el canto. A éstas podríamos añadir, una gran capacidad para aprender y una necesidad de ser reconocido como parte de algo,  de un entorno social.

7.- Vulnerabilidades: Su gran confianza en que todo puede cambiar y mejorar, es su gran debilidad. A veces se deja guiar por la figura de un ser superior que no le permite desarrollarse y evolucionar

martes, 24 de enero de 2017

EDUCACIÓN EXPANDIDA


El gran reto de la educación de nuestro tiempo. Convertir el fenómeno educativo en un continuo.
Aprender en cualquier lugar, crear el espacio donde se generen aprendizajes. Salir del aula en busca de conocimiento. Llevar al aula la vida real.
Me gusta la metáfora de Gabriel Celaya en su poema "Educar·. Como capitanes del barco, necesitamos marineros valientes, sin miedo a equivocarse, aprendiendo del error, dejándose llevar por el oleaje, llegar a nuevos destinos, disfrutar del momento, de la compañía. Debemos ser los dinamizadores de un barco cargado de diferencias pero con el mismo objetivo: aprender, descubrir, soñar. Nuestras armas para gobernar el barco han cambiado. Trabajamos cooperativamente, a través de proyectos, dentro de una nueva cultura de pensamiento sobre la que construir los aprendizajes. Hoy nuestros marineros sienten la necesidad de complacer sus múltiples inteligencias, de aprender desde la emoción, en un entorno rico, tanto en la escuela como en la familia. Todo ha de ser un summun que permita llegar al conocimiento, ha realizar un andamiaje a través de sucesivos aprendizajes. Un andamiaje que se irá retocando, modificando a medida que accedemos a nuevos conocimientos.